Cráteres de impacto en Argentina
Cráteres de impacto – viejas marcas de meteoritos y asteroides. Nuestro planeta muestra incontables huellas de antiguos impactos de meteoritos y asteroides. Fosas de distintos tamaños y profundidades que, en general, han sido desgastadas y hasta escondidas por los factores erosivos (lluvias, inundaciones, vientos, etc). Muchos cráteres están ocultos en el fondo de mares y océanos. Pero otros aparecen en la superficie de los continentes.
Cráteres que nos hablan de fenómenos natuarales
Y la Argentina no es la excepción. En este artículo vamos, justamente, a ocuparnos de esos cráteres que nos hablan de fenómenos natuarales de una violencia difícil de imaginar. Pero antes, vamos a hablar de sus orígenes: aquellas grandes rocas espaciales que deambulan por el Sistema Solar, y muy especialmente, aquellas que se acercan a la Tierra.“Escombros espaciales”
Podría decirse que los asteroides son “escombros” cósmicos que sobraron de la construcción planetaria. Fragmentos de roca o metal que tienen desde muchos kilómetros, hasta unos metros de diámetro, y que giran alrededor del Sol.
Los asteroides del “Cinturón Principal”
Los asteroides del “Cinturón Principal” giran alrededor del Sol en órbitas casi circulares, entre Marte y Júpiter. Sin embargo, a cierta distancia del Sol, la fuerza de atracción gravitatoria de los planetas los perturba en su viaje orbital, cambiándoles el rumbo. Júpiter es el responsable principal de alterar las órbitas de los asteroides del Cinturón Principal. Los atrae cambiando una órbita casi circular en una nueva, ahora de forma elíptica.Otro mecanismo de cambio orbital son los impactos y choques entre asteroides dentro mismo del cinturón.
Esos choques producen “astillas gigantes” que salen disparadas en nuevas órbitas que las alejan de su lugar de origen. En muchos casos estas órbitas nuevas se cruzan con la de algún planeta cercano. Muchos asteroides se mueven en órbitas verdaderamente caóticas por todo el Sistema Solar interior. Y es así como un asteroide que se originó en el Cinturón Principal se transforma, con el tiempo, en un asteroide que se acerca a la Tierra.
Asteroides e impactos
Los Asteroides que se Acercan a La Tierra (AAT) giran en órbitas elípticas (de forma ovalada), y como consecuencia, su distancia al Sol cambia mucho en cada período de translación. Los planetas giran en órbitas casi circulares por lo que su distancia al Sol varía muy poco a lo largo de un periodo de translación. Es por eso que los AAT se cruzan con la órbita de La Tierra. Si cruzan la órbita terrestre en un punto exacto de coincidencia entonces el asteroide puede chocar con ella, formando un cráter de impacto.Los choques entre AATs y la Tierra han ocurrido incontables veces a lo largo de la historia de nuestro planeta. Se trata de un proceso geológico/astronómico raro, pero activo, y capaz de liberar cantidades colosales de energía. El impacto de un gran asteroide puede ser millones de veces más poderoso que el peor terremoto, o la mayor erupción volcánica posibles. Y ello se debe a tremenda energía cinética que el asteroide descarga al chocar contra la superficie terrestre: en promedio un asteroide de medio kilómetro, moviéndose a 20 km/seg liberará unos 25.000 megatones de energía al impactar (un megatón equivale a un millón de toneladas de TNT). Para tener una idea, digamos que una bomba termonuclear de Hidrógeno libera al detonar unos 20 megatones de energía (o sea: aquel impacto hipotético equivaldría a unas 1000 bombas de hidrógeno). La diferencia entre los impactos y otros procesos geológicos terrestres está en la velocidad con que se libera la energía. En un impacto, la energía se libera casi en forma instantánea.
Formación de cráteres
Al chocar, la energía cinética del asteroide se transforma en una onda de shock. Se trata de un pico de altísima presión (desde cien mil, hasta cinco millones de veces la presión atmosférica normal) que se propaga muy velozmente (a varios kilómetros por segundo) a partir del punto de impacto. La superficie terrestre y el asteroide sufren los efectos: a medida que la onda de shock se propaga, va perdiendo fuerza con la distancia. Pero aún así, enormes cantidades de roca superficial son lanzadas hacia el cielo, astilladas, deformadas, fundidas y hasta vaporizadas. Todo en cuestión de segundos. Las temperaturas en la zona de impacto alcanzan miles de grados centígrados. Curiosamente, o no, nada queda del asteroide que chocó contra la superficie terrestre. Toda su masa se transforma en vapor, justamente a consecuencia de los efectos del paso de la onda de shock que lo castiga.Como resultado del impacto, se forma una cicatriz en la superficie de la Tierra (o la de cualquier otro astro de superficie sólida), con forma de cuenco circular: un “cráter” o “estructura de impacto”. Muy a grandes rasgos. podemos decir que un asteroide abre un cráter cuyo diámetro es igual a 20 veces su propio diámetro. Por ejemplo: el impacto de un asteroide de 50 metros podría generar un cráter de 1.000 metros de diámetro.
Dos tipos de cráteres
Podemos clasificar los cráteres de impacto en dos grandes familias:
A) Cráteres simples. Son hoyos con forma aproximada de taza. Nunca tienen más de 5 km. de diámetro. El más popular en su clase es el famoso Meteor Crater (o cráter Barringer) de Arizona, Estados Unidos. Se trata de una espectacular fosa de 1.200 metros de diámetro, provocada hace 50 mil años por el impacto de un asteroide metálico (hierro y níquel) de unos 40 o 50 metros de diámetro.
B) Estructuras complejas. Pueden tener desde unos 4 o 5 hasta 400 km. de diámetro. Se las define como grandes estructuras geológicas circulares, que muestran una alternancia de anillos elevados concéntricos y valles hundidos, delimitados en el borde de la estructura por zonas de fractura. Llegan a ser cien veces más anchas que profundas. Los cráteres del tipo complejos poseen estructuras centrales elevadas (un pico central o un anillo de picos centrales según el caso), rodeadas por un surco anular y un reborde fracturado. Entre la estructura central y el reborde hay diferentes materiales transformados por el impacto. La formación del cráter complejo se asemeja mucho al efecto producido por una gota de agua al caer en un estanque: se forman anillos concéntricos a partil del punto de choque.
200 cráteres de impacto en Argentina
Se han catalogado unas 200 estructuras y cráteres de impacto sobre la Tierra. Y tienen desde unas decenas de metros, hasta cientos de kilómetros de diámetro. En la Argentina, puntualmente, ya se han reportado numerosos sitios con posibles cráteres de impacto: la mayoría han sido reconocidos y estudiados sólo a través de imágenes satelitales y fotos aéreas. Por eso, actualmente se están desarrollando las investigaciones geológicas de campo en cada sitio para confirmar o descartar su origen por meteoritos gigantes. A continuación damos cuenta de los casos más notables reportados hasta enero de 2007:
1) Campo del Cielo, Región Nordeste (27º 30’ Lat S; 61 º42’ Long O).Sin dudas, es el caso más emblemático. De hecho, es uno de los más grandes y famosos campos de dispersión de meteoritos de todo el mundo. Se ubica entre las provincias del Chaco y Santiago del Estero, extendiéndose en dirección SO-NE, en un área de unos 1350 km 2.
El objeto que produjo los impactos cayó a la Tierra hace unos 4000 años. Era un pequeño asteroide metálico, cuyo diámetro inicial (“pre-atmosférico”) ha sido estimado en unos 8 metros. Y un peso de más de 800 toneladas. Habría llegado desde el Sudoeste, entrando a la atmósfera terrestre en un ángulo de 9°. Como consecuencia, el asteroide se rompió en incontables piezas menores, algunas de las cuales, al chocar contra la superficie de sedimentos cuaternarios, produjeron decenas de cráteres.El cráter mas grande, llamado “Laguna negra” tiene un diámetro de 115 metros (similar al de un estadio de fútbol).
En el cráter “La Perdida” fueron recobrados numerosos fragmentos con un peso total de 5.200 kilogramos. Y uno de ellos está en exposición en el Planetario de la Ciudad de Buenos Aires “Galileo Galilei” El meteorito más grande de Argentina, conocido como “el Chaco”, pesa 37,4 toneladas y fue hallado en 1980 dentro del cráter “Gómez”, de 25 metros.
2) Bajada del Diablo, Chubut, (42º 45’ Lat S; 67º30’ Long O).Se han detectado más de 50 cráteres en un área ubicada entre las localidades de Telsen y Gan-Gan, Chubut. A través de las fotografías aéreas disponibles, pueden reconocerse más de 100 posibles cráteres simples, en un área de dispersión de 27 x 15 kilómetros. El mayor tiene un diámetro de 1 km. Y hay otros 14 de entre 300 y 1000 metros. Muchos muestran bordes elevados. Los cráteres están localizados principalmente sobre depósitos sedimentarios fluviales, de más de un millón de años.
3) Río Cuarto, Córdoba (32º 52’ Lat S; 64º 14’ Long O).Es un tipo especial de estructuras oblongas, cuya aceptación como producidas por impacto meteorítico está muy discutida (dado que pueden ser simples cuencas de deflación producidas por el viento).
Su descubrimiento se produjo cuando, al sobrevolar el área, se observó algunas curiosas estructuras paralelas, de pocos kilómetros de diámetro, y alineadas en dirección NE-SO a lo largo de 30 kilómetros. La exploración de campo reveló la presencia de vidrio de impacto.Las depresiones ovales investigadas recuerdan aquellas estructuras recreadas en laboratorios, mediante un proyectil impactando en un ángulo de incidencia muy bajo.
Según esta hipótesis, un asteroide de alrededor de 200 metros de diámetro entró en la atmósfera terrestre desde el Noreste, con un muy bajo ángulo, fragmentándose luego en numerosas piezas que terminaron impactando. Sin embargo, recientemente se han reportado más de cuatrocientas nuevas estructuras similares, y orientadas en la misma dirección. Y se prefiere atribuirlas a la erosión eólica. ¿Impactos o erosión? Ambas hipótesis parecen razonables, así que habrá que esperar nuevas investigaciones para definir cuál es la correcta.
4) Meseta de la Barda Negra, Neuquén (39º 10’ Lat S; 69º 53’ Long O).Cráter aislado de 1,5 km. de diámetro, alojado en medio de una meseta de roca basáltica. Se lo detectó mediante el cuidadoso estudio de imágenes satelitales. Se trata de un cráter relativamente “joven”, con una edad estimada menor a 10 millones de años. No puede descartarse que sea un cráter explosivo de origen volcánico.
5) Bajo Hondo, Chubut. (42º 15’ Lat S; 67º 55’ Long O).Es una estructura interpretada como una caldera basáltica volcánica colapsada, de 4,8 km de diámetro y bordes elevados 100 a 150 por sobre el área circundante. Bajo Hondo ha sido comparado recientemente con el cráter de impacto de Lonar Lake, en las India, único cráter de impacto de tipo simple, ubicado sobre rocas basálticas, conocido hasta hoy. Bajo Hondo bien podría ser un gigantesco cráter de impacto que ha sido mal interpretado como una caldera volcánica. Solo nuevas investigaciones resolverán este misterio.
6) Meseta del Canguel, Chubut. (44º 28’ Lat S; 68º 35’ Long O).Son 3 posibles cráteres ubicados sobre una meseta de roca basáltica. Fueron descubiertos a partir de imágenes satelitales. Diámetros: 1,3 ; 0,8 y 0,6 kilómetros respectivamente. Su edad se estima en menos de 20 millones de años.
7) Gran Altiplanicie Central, Santa Cruz. (48º 25’ Lat S; 70º 08’ Long O).Forma circular aislada, con bordes elevados, y de 1 km de diámetro. Está en medio de una meseta basáltica. La edad de este cráter se estima en menos de 12 Millones de años.
8) Estructura Circular Los Mellizos, Santa Cruz (47º 20’ Lat S; 70º 00’ Long O).Otro potencial sitio de impacto ha sido observado no muy distante del anterior. Se trata de un posible cráter gigante de forma bien circular, con un pico central. Esta estructura circular esta algo erosionada y es muy evidente en las imágenes satelitales de ecos de radar. Su diámetro es de 15 kilómetros. Su edad se estima en más de 170 millones de años.
9) Salar de Antofalla, Catamarca (26º 15’ Lat S; 68º 00’ Long O).En la esquina Sudeste del “Salar de Antofalla” ha sido identificado (a través de la observación de una imagen satelital) un posible cráter de tipo simple, de 750 m de diámetro. Su edad se estima en menos de 1 millón de años.
10) Salar del Hombre Muerto, Salta. (25º 12’ Lat S; 66º 55’ Long O).Un grupo de diez cráteres circulares, cuyos diámetros oscilan entre 90 y 250 m, distribuidas en un área oval de 5 x 4,5 kilómetros, posiblemente producidas por el impacto de meteoritos con la superficie terrestre. Ha sido detectado a través de fotografías aéreas y satelitales. Su edad se estima en menos de 500.000 años.
11) Anomalía Geofísica de Islas Malvinas (51º 00’ Lat S; 62º 00’ Long O).Aunque todavía no está confirmado, un posible gran impacto podría haber afectado la zona de las Islas Malvinas, hace unos 300 millones. Una gigantesca estructura está oculta bajo el agua, y cubierta de sedimentos más modernos, al NO de la Isla Gran Malvina.
Se ha detectado allí una estructura circular de 200 a 250 km de diámetro, en mapas de anomalías del campo gravitacional terrestre. De confirmarse su origen por impacto, sería una de las 5 estructuras de impacto más grandes del mundo.
Como vemos, algunos casos ya están claramente confirmados como lugares de impactos de grandes meteoritos. Y otros están en duda. La investigación de cráteres de meteoritos gigantes es una ciencia bastante joven, y es de esperar que con el tiempo aparezcan grandes sorpresas. Las grandes sorpresas que caracterizan y hasta defines la aventura del conocimiento científico.